
La adopción de una mascota, cualquiera sea, es un proceso que requiere de tiempo, sobretodo si nunca hemos tenido mascotas o hace muchos años de eso. Ese proceso tiene una primera etapa de consideración en familia, si es el caso, donde se deben consensuar determinadas cosas. El primer punto es la aprobación de todo el grupo ya que una decisión en base a dudas no sirve. Una vez que se ha dado el si, hay que ver que es lo que debemos tener y que mascota queremos.
Cubrir los gastos
El siguiente punto es monetario, porque no podemos avanzar más en la idea, si no podemos sustentar la alimentación, salud y cuidados de la mascota en forma razonable.
Luego decidimos que tipo de mascota, perro, gato, ave, etc. De acuerdo a eso se ven cuales son las tareas necesarias y quien las va a cumplir. Según el tiempo disponible será la mascota que vamos a elegir. Sin duda alguna un perro requiere de mucho tiempo de dedicación todos los días del año. Un gato menos, un ave menos aún y ni hablar de los peces. Claro que podemos tener el dinero y el tiempo pero no el espacio, o la menos no para cualquier raza.
Siguiente paso
Cachorro o adulto (en caso de perros y gatos). Nuevamente depende más que nada del tiempo disponible, que en un cachorro es mucho más.
Dedicarle el tiempo necesario
Ya con la idea bien concreta es el momento de comenzar a ver refugios, dando toda la información de que es lo que estamos buscando.
Pero el momento de esta búsqueda concreta conviene que sea cuando todos tenemos tiempo. Si estamos como para unas vacaciones con poco dinero y por lo tanto con un rápido retorno, ese es el momento. Cuando todos estamos en casa más horas y les podemos prestar atención a la adaptación de la nueva mascota.