En casi todos los países del mundo, algunos más y otros menos, la historia es parecida: la dimensión del problema de los perros abandonados. En Chile se estima que existen unos tres millones de perros que viven en las calles, lo que nos parece una cifra especialmente abrumadora y demuestra todo el trabajo que hay que hacer en ese sentido en dicho país. Uno de esos perros callejeros ha protagonizado una historia que merece ser contada por lo impactante de los sentimientos.
Un poco de historia
Una familia norteamericana pasaba sus vacaciones en un crucero, el Carnival Splendor y uno de los puertos visitados era Valparaíso. Como ocurre en estos casos los turistas bajan del barco para conocer el lugar. La familia O’connor, apenas bajó del barco, se encontró con un perro mestizo y muy bonito, que solo se dedicó a seguirlos y moverles la cola con alegría. En casi todas las fotos de ese paseo, el perro está presente.
Cuando la familia regresa a Seattle, comprenden que no van a olvidar a ese hermoso perro. El problema era cómo ubicarlo, especialmente desde esa distancia. Pues no fue simple, pero lo consiguieron. Mandaron un mail a una protectora de animales y algo de dinero para ubicarlo. Luego de tres días de búsqueda por las calles, los carteles con las fotos dieron resultado y el perro fue encontrado. Lo siguiente ha sido la etapa de trámites para permitir que el recién adoptado perro, pueda viajar a Estados Unidos.
Unos tres mil euros o mas será el costo, pero la familia espera ansiosa a Chilli Dog, en su nueva y definitiva casa. Aún deben esperar un poco ya que la cuarentena será obligada y son tiempos que no pueden abreviarse.
Muchas personas han criticado a esta familia por no adoptar un perro local y gastar lo que han gastado. Pues nada tiene que ver una cosa con la otra, y es algo tonto discutir la nacionalidad de uno. Desintoxica tu vida de pensamientos críticos y llénala de acciones como ésta.